CORRER DA MÁS VALOR A MIS DÍAS

Ahora que llevo tiempo sin salir a correr me ha dado tiempo para pensar en aquellos días que lo hacía. Por gusto, por compromiso, por mí, por el objetivo o por la rutina.

Correr por rutina. Sin pensar en el bien o el mal que me hacía. Sin capacidad de decisión sobre mi hábito que casi mecánico, invitaba a ponerme las zapatillas como siempre a más o menos la misma hora. Simplemente, me cambiaba y zapatilla en ristre salía de casa a correr.

Muchos días era el acto, templado y tranquilo, el que me empujaba como metido en un bucle, en una nube, a que pasaran los minutos, los kilómetros, los pensamientos. Buscando en solitario que la soledad se alargara y que nadie la interrumpiera por la necesidad de colocar las ideas en sus huecos y las personas en sus sitios. Por la imperiosa necesidad de escaparme no sé de dónde ni de quién. Pero escaparme. Por la obligatoriedad de desconectar, tocar el pause del mundo, de la vida y grabar de nuevo, a fuego, aquellos principios que estaban llegando a su final.

Otras, salía a correr buscando compañía. Esa que siempre me saca una sonrisa y hace que entre cada curva de mis labios y mi sonido a carcajadas, pasen sin darme cuenta los momentos. Momentos increíbles que dan forma y sentido a mis zancadas. Que recuerdan, en presente, la importancia del compartir, del sentir, del apoyar, del conectar. Con gente, con la felicidad, conmigo mismo.

TOMBADO

Correr por gusto. Por propio placer y gula. Esa que no se sacia al sumar kilómetros. Esa gula como capital del pecado que los hambrientos corredores como yo, no quieren empachar. Ni quiero eliminar.

Correr por gusto y por engordar. Engordar mi autoestima, mis endorfinas y mi ego. No de egoísta sino de juego. Mi juego preferido, el que me hace sentir niño, hacer el trasto y reír, hartarme de reír. Me llena de energía y me la vacía. Correr me permite comerme ese premio de después o pasar tiempo en familia, esa que me empuja en el momento justo, cuando faltan fuerzas como si de un columpio se tratase; correr me permite jugar con el barro en el parque, pisar los charcos y llegar a casa con las zapatillas hechas trizas.

Correr por compromiso. No con nadie sino conmigo. Ese compromiso que me lleva a ser fiel y amarme, en lo bueno y en lo malo; A quererme y respetarme, en la tristeza y en la agonía; A cuidarme y protegerme, en la salud y en la enfermedad. Todos los días de mi vida.

Correr por el objetivo de correr. De no estar en casa en el sofá. De sentir el frío o el calor en mi piel. Porque me pique el ojo con el sudor, porque me salga esa señal bicolor en mi cuerpo que casualmente coincide con los límites de las camisetas o por llevar más capas que una cebolla que poco a poco voy quitándome para anudármelas en la cintura. Por ese guante con el agujero en el dedo o por esa zapatilla desgastada que se usa los días de lluvia que son precisamente cuando más agarre necesito. Por ese objetivo marcado en el calendario que me hace especial ilusión y que da rumbo a toda mi navegación a bordo de un gps.

GANANDO

Correr por mí. Porque sin dudarlo puedo decir que correr da más valor a mis días. Porque me he dado cuenta que soy un huérfano sin caminos, sin vueltas al parque, sin repeticiones en la pista. Soy huérfano sin zancadas, sin laps en cada vuelta, sin el pulso a más de 180. Soy huérfano sin las mallas, sin ponerme bien la lengüeta o sin sacarme la camiseta del pantalón. Soy huérfano sin el entreno, sin el ritmo y sin el dorsal. Soy huérfano de mí sin mi otra parte, correr. Correr da más valor a mis días.

entrenadoratletismo
Juan Pablo Gómez Martín
@juanpacoach
http://www.entrenadoratletismo.com
Entrenador Nacional Atletismo
Alto Rendimiento Deportivo

LA EXCUSA PERFECTA

El camino de la excusa no es una espina de rosas.

Vencerla es el paso más determinante en la trayectoria que vayas a tener corriendo. Más incluso que cruzar metas o traspasar límites personales.

Es el “yo” interior más esclavizante que conozco y consigue a la vez las sensaciones más fatídicas y duraderas que pueden sentirse. Letal para el que comienza y crucial para el que ya tiene el hábito adquirido.

Las hay de diversas formas, normalmente vestida de cobarde. Con atuendos no perecederos que aparecen una y otra vez, en todas partes, en el momento preciso.

Trabaja en silencio, sigilosa y sirve de atenuante al esfuerzo. Placer momentáneo como droga de diseño que tiene pinta de diseñarse por uno mismo como obra de arte que acaba por pasar factura, a la larga, y eso que fue pensada de manera gratuita.

Nos convence al instante, nos enamora su forma y como cantos de sirena acabamos rendidos a su encanto. Nos encanta como suena en nuestras cabecitas ya que siempre nos habla con voz dulce y convincente.

Unas veces con nombre de frío, otras con lluvia en su apellido, otras de alojamiento en manta caliente y otras con el confort en forma de sofá. A veces es el tiempo, ese que no tenemos para hacer y que usamos para deshacer lo hecho. Otras en forma de molestias propias o ajenas, reales o ficticias, fugaces o pasajeras. Otras, simplemente, excusas envueltas de estados de ánimo que parece que se arreglan desde la desgana, desde la parada.

rakelcebe

Es la excusa el mayor enemigo del atleta. La misma que puede ponerte en acción y ser el pretexto de una gran obra que día a día va tejiendo a base de esfuerzo, trabajo, sacrificio y constancia esos miniobjetivos que te ayudan a crecer y a creer. Esa misma que como fin, corta de raíz lo ganado, luchado y vencido. Destroza el camino con baches y saltos al vacío. Con dudas y remordimientos que sólo en nuestras cabezas han vivido. Con paradas que dejan entrenamientos huérfanos y dolidos.

Esa que ve en el rigor y en la responsabilidad el contrincante que quiere herido. Que quiere noquear y ver caer todo lo que ha construido.

La excusa quiere instalarse dentro de ti, como huésped indefinido. Siempre quiere aparecer y siempre tiene en convencerte su objetivo.

La excusa no es exclusiva, no es tuya ni para ti. Aunque pueda contigo. Está en cualquier cabeza buscando un sitio. Buscando aparecer, convencer y conseguirlo. En la del que gana aunque creas que es sin motivo. En la del que nunca falla que día tras día con su batalla ha vencido.

mamen4

A la excusa le fastidias tú si haces caso omiso. Si pones tu convicción al servicio de correr, si sumas km y días con sentido. Si sufres y quieres volver. Si quieres recorrer tu camino. Si piensas en lo que quieres conseguir, si recuerdas el motivo. Si crees en tus posibilidades y vuelves de nuevo sentirlo. Si pase lo que pase te calzas en los pies la ilusión y el reto de conseguirlo.

La excusa perfecta es aquella que utilizas para salir a correr sin importar el motivo.

entrenadoratletismo
Juan Pablo Gómez Martín
@juanpacoach
http://www.entrenadoratletismo.com
Entrenador Nacional Atletismo
Alto Rendimiento Deportivo

TUS OBJETIVOS Y TÚ

Tendemos a ver lo de fuera mejor que lo nuestro. Pensamos que las acciones de otros tienen más repercusión o son mejores que las que desarollamos nosotro@s y que los entrenamientos que MUESTRAN otros harán que cumplan sus objetivos mientras que los nuestros no van a hacer que cumplamos los nuestros.

Y bien, puede ser verdad y lo hagan, puede que haya acciones mejores que las nuestras porque ni somos perfectos ni los únicos y puede, que a veces, las circunstancias de fuera sean más favorables que las que manejamos nosotros.

Pero mi idea en esta línea es dejar claro que NO PODEMOS CONTROLAR LO QUE HACEN OTROS sin embargo podemos crecer y mucho, cuando nos centramos en exprimir al máximo nuestras condiciones y circunstancias.

entrenaymejora

¿Los entrenamientos que muestran otros van hacer que tú mejores? ¿que puntualmente hagas mejores entrenamientos quiere decir que vayas hacer mejores marcas o ganarlos? ¿que sepas lo que hacen otros influye en lo que haces tú? ¿modificas tu hoja de ruta en función a lo que hacen los demás? ¿coges algún entrenamiento que ves publicado e intentas hacer lo mismo?

Ahí es dónde quiero llegar. Tú y sólo tú. Eso es lo que debe ocuparte y preocuparte cuando estás inmers@ en tus entrenamientos y carreras. Planificar de manera clara, coherente, sensata y personal es lo que te va ayudar a mejorar y esa mejora es la que debes perseguir.

Tus km sólo puedes hacerlos tú. Tu compromiso y lo que tú hagas y SÓLO LO QUE TÚ HAGAS es lo que va hacer que mejores y crezcas como atleta. Todo lo demás, es salsa rosa.

No digo que esté mal ver lo de los demás (faltaría más), digo que tú no deberías compararte con nadie y si lo haces que sea contigo mism@. Y por supuesto para crecer en positivo. Qué cosas has mejorado, cómo evolucionas, en qué debes incidir, qué aspectos cuidar más y mejor, qué te haría evolucionar más, dónde están tus debilidades y reforzarlas.

Si nos fijásemos sólo y únicamente en nosotros, centráramos nuestra atención en nuestras propias acciones y marcáramos dónde incidir para mejorar, encontraríamos una situación 100% recomendable de crecimiento. Focalizar nuestras energías en lo que podemos hacer, en lo que nos beneficia y fijar nuestras metas en el progreso propio.

¿Cuántas veces en una línea de salida de una carrera has pensado madre mía cómo corre ese/a y luego no corría tanto? ¿cuántas veces has pensado aún ganando tiempo a una marca, la pierdo al final? ¿Cuántas veces te han acompañado los miedos y las dudas? ¿Cuántas veces has alimentado a los demonios de tu cabeza? ¿cuántas veces compitiendo dejas de pensar en correr? ¿cuántas veces te fijas en cómo corre el de adelante? ¿Cuántas veces en habré salido rápido o he hecho bien en hacer esto? ¿Quién me manda?

entrenadoratletismo.jpg

O una frase que puede ayudarnos a resumir todo: SABÍA QUE HOY NO ERA EL DÍA….

Si a una carrera o entrenamiento vas a ser FUTURÓLOG@ O MAG@ y no vas a ser ATLETA QUE PIENSA EN SÍ MISM@ y en sacar las máximas ganancias a las circunstancias que tiene, si pierdes esa concentración y focalización, la mejora, el objetivo…. se esfuma.

Recuerda, corres para ti y nadie mueve tus piernas. Cuando corres (entrenas o compites) sólo tienen que estar TUS OBJETIVOS Y TÚ.

entrenadoratletismo

Juan Pablo Gómez Martín
@juanpacoach
http://www.entrenadoratletismo.com
Entrenador Nacional Atletismo
Alto Rendimiento Deportivo

VALORA LO CONSEGUIDO

Te escribo a ti, querido pasado, para cuando nos encontremos y seas mi amigo.

Aún no, no lo eres. Coqueteas conmigo y a veces, amigos tuyos me hacen que quiera saber de ti. Pero no, no es el momento. Quizás, algún café o alguna pausa tranquila en el sofá, pensando en ti. Pero aún no quiero lazos que me hagan pensar en ti demasiado.

 

ENTRENADORATLETISMO

Sé que en tu pandilla estáis bien rodeados. El correr manda y después, la velocidad, la resistencia, la recuperación, el ritmo, el puesto y la marca y un largo etcétera de situaciones vividas hacen acto de presencia a tu lado.

 

Tienes tatuado 1991 como el año en que te vi por primera vez. Corría, sí, sólo corría. El 2000 grabado a fuego, comencé a entrenar y tú te acuerdas perfectamente.

 

Quería escribir unas líneas para recordar, para que cuando formen parte de ti, querido pasado, pueda leerlas con nostalgia. Qué suerte tener un espacio al que volver con cariño.

 

Tú, que lees esto, sabes perfectamente de lo que hablo. De que hay que aprovechar el momento y disfrutar. No quejarse tanto, no sacar tantos «peros», ni ser tan negativos porque la situación, corriendo y en el atletismo, llegará a ser peor. Sí, será peor y mirarás al pasado. Y sí, te darás cuenta que no debías haberte quejado, ni lloriqueado, ni molestado.

 

Llegará el día en que la velocidad que alcanzas y el ritmo que llevas hoy, querrás y desearás tenerlo. Ahora te quejas y seguro, te acordarás de él y querrás volverlo a tener. Dentro de 10 años o de 15, nada será igual. No esperes a darte cuenta para disfrutar el hoy.

 

entrenaymejora

 

Llegará el momento en el que tu resistencia, tu aguante, no te permitirá hacer tantos km. No podrás. Y sentirás con orgullo, al contarlo, las tiradas que hacías. ¿Es necesario esperar 15 años para sentirte orgullosos en vez de estarlo hoy?.

 

Llegará la situación en la que no le des valor al puesto ni a la marca. No podrás hacerlo, simplemente porque no formará parte de tu ambición sino que estará en un segundo plano. Recordar con anhelo lo que fuiste capaz de hacer te llenará de alegría. ¿Es necesario esperar unos cuántos años para valorar lo que haces antes de ser feliz con lo que haces hoy?

 

Y sí, llegará la necesidad de tener que recuperar más para seguir haciendo lo que te gusta. Necesitarás más descanso para poder salir a correr y no sentirte agotado. Llegará el momento que el placer será ese, correr. Sin exprimirte, sin exigirte, sin forzarte. Necesitarás más recuperación para hacerlo y correrás menos días, aquellos que las alarmas del organismo te dejen. ¿Es necesario llegar a ese día en vez de disfrutar de la posibilidad de correr bastantes días a la semana (los que quieres) como haces hoy?

 

Querido pasado, quiero darte la razón cuánto más tarde mejor. Quiero que me enorgullezca al tenerte conmigo cuando seas mi amigo Pero aún hoy, querido pasado, déjame que siga abrazado al presente que en su pandilla están la felicidad, la actitud positiva, el valor de las cosas y los momentos, la sensación de mejora y las ganas de exprimirme.

 

Querido pasado, constrúyete con toda la ilusión del mundo. Llénate de experiencias y carreras. Rodéate de las mejores personas. Siente los mejores ritmos. Bebe de la satisfacción y come mucho del HOY y del día a día, son sanos y te harán durar más.

 

Te espero en el futuro, espero que también con tu pasado.

 

  • Da valor a lo que consigas
  • Que la exigencia no te agote/agobie
  • Disfruta como plato principal sin esperar al postre
  • Corre y exprímete lo que desees
  • Comparte momentos en entrenos y carreras
  • Mantén la positividad

 

entrenadoratletismo

Juan Pablo Gómez Martín

Entrenador Nacional Atletismo

Alto Rendimiento

@juanpacoach

http://www.entrenadoratletismo.com

Vanessa Silva: Una Mamarunner gemelar

Me presento: Soy madre gemelar a tiempo completo, enfermera de profesión y corredora en mi tiempo libre.

Lo mío era ir a andar, hacer mi particular ruta del colesterol. Correr ni se me pasaba por la cabeza, a pesar de convivir con un deportista nato que en alguna ocasión consiguió sacarme a rodar hace ya muchos años.

Soy muy calculadora y así hace 6 años la idea de ser madre pasó por mi agenda de la vida. Decidí por entonces cuidarme más de cara a que mi cuerpo llevara mejor un embarazo y empecé a dar la «vuelta chica» en el parque donde habitualmente entreno ahora. Eran unos 6 k de rodaje  3 o 4 días en semana, sólo por disfrute y despacito. Quedamos los últimos en la San Silvestre de Don Benito de aquel año, pero acabarla, ¡fue todo un logro!

Entre tanto, hubo parones varios, como un embarazo que acabó en aborto y después un embarazo gemelar que me hizo madre hace 3 años por partida doble de 2 pequeñas que llegaron para revolucionar mi cuerpo, mi alma y mi mente.

Absorbida en tiempo y cuerpo por la maternidad y lactancia, decidimos en el Consejo de padres (osea él y yo) que el running sería el mejor aliado como opción de «me-time»  para ambos y para inculcarles a ellas todos los valores que un deporte conlleva, como si de un reflejo de lo que es la vida se tratase.

vane3

Disponíamos de una baza importante, cosas de familia, el entrenador lo teníamos en casa. Y para más suerte, no uno cualquiera, sino el mejor. ¡Entrena y mejora es nuestro lema!

Se planificaron 3 salidas a la semana, 3 horas semanales para cada uno, 3 entrenos, 3 relevos que hacer entre papi y mami para que las peques siempre estuvieran con alguno de los dos en el parque. Y así seguimos.

Empezaron las sorpresas cuando veía que asimilaba entrenos y cumplía los objetivos. Comencé a participar en carreras populares y encima ¡conseguía podiums! Al principio sólo por categoría y después incluso en la general. Y la verdad, una recompensa escénica al esfuerzo realizado siempre ayuda.

Primero me limitaba a seguirle a él, mi compañía inseparable, mi liebre. Ya después me fijaba tiempos de salida y recalculaba en carrera las opciones dentro de mis posibilidades.

Sé sufrir, esa es mi baza, según dicen. Quizás sea cierto, pero también soy de la creencia de que todo lo que me proponga puedo conseguirlo.

En lo más alto he subido en 2 ocasiones: un primer puesto en una milla en abril de 2017 y en Cross 10k Talavera la Real en abril 2018.

vanetalavera.jpg

Sensación única el ganar una carrera y como siempre digo, al menos ya sé qué es lo que se siente. ¡Eso que me llevo!

Pero la mejor sensación corriendo hasta ahora ha sido en la San Silvestre de 2017, ese 4’07» por k de media en algo más de 5000m es mi mejor tiempo realizado y fue una gozada de carrera. Si la vida son momentos, éste es uno de los míos.

Me motiva sentirme bien, ocupar mi tiempo libre con salud y no bajar el rendimiento, porque una vez he llegado a un punto quiero al menos mantenerlo, pues el camino no está exento de esfuerzo.

Intento aprovechar al máximo ese rato de que dispongo, siempre encapsulado entre el trabajo y la vida familiar.

«Se hace lo que se puede» respondo a quién me pregunta cómo hago para sacar tiempo para entrenar. Con eso me refiero a que hay que priorizar, nunca descuidar la maternidad ni las personas importantes, sí mantener mi ratito de entreno así sea con frío, lluvia o calor….y quitarle tiempo a otros menesteres que he descubierto no tienen relevancia.

Disfruto corriendo y compartiendo con mi marido una afición pero disfrutamos más viéndolas a ellas aprender con nuestro ejemplo, calentar con nosotros en el parque antes del entreno, de sus caras de ilusión por el babyrunning, del ambiente familiar que nos inunda, que nos vean y animen en carrera y de subirlas conmigo al podium.

img_4152.jpg

¿El próximo objetivo? Seguir entrenando y mejorando. Y si puedo llegar a correr un 10k a 4′ mejor que mejor….aunque aún me queda para eso….todo llega.

entrenadoratletismo

 

 

 

 

Juan Pablo Gómez Martín

Entrenador Nacional Atletismo

Alto Rendimiento

@juanpacoach

http://www.entrenadoratletismo.com

LA OBSESIÓN POR EL LOGRO

¿Qué pasa si no consigues el objetivo? ¿Qué cambios se producen en tu vida?¿Qué cosas cambian a tu alrededor?

Es inevitable querer mejorar, el gusto de ser capaces de traspasar la frontera de nuestra marca, esa que un día nos hizo mejores, esa que un día nos puso a prueba y la vencimos, claro que sí. Pero ¿a cualquier precio?.

cruzatulimite

Nuestras decisiones siempre involucran que para ellas, pagaremos un precio. El que sea, de mayor o menor valor, de mayor o menor duración, pero siempre hay que pagarlo. Llámalo tiempo, llámalo sufrimiento, llámalo vida social, llámalo dolor, ponle el nombre que quieras pero está claro que siempre que tomamos una decisión hay que sacrificar ciertas cosas.

Esto no significa que no tengamos los pies en la tierra, que no seamos capaces de ver la realidad y saber qué cosas puedes plantearte conseguir cuando estás en una línea de salida.

Tú eres lo que eres con tus defectos y virtudes pero no eres más de lo que eres. Aunque esto sea una obviedad el hecho de pensar que somos más de lo que somos nos hace equivocarnos y centrados en el mundo deportivo, nos hace tomar decisiones que nos perjudican sobremanera.

Tú no eres profesional de esto (si lo eres y me estás leyendo, siéntete afortunad@) y por tanto, no tienes por qué pagar el precio que pagan ellos. Lo hacen por una contraprestación (trabajo) económica, social y deportiva. Claro que tienes las mismas ganas o más de mejorar, de conseguir tal o cuál marca, pero recuerda que eres lo que eres y no más de lo que eres, aunque también tengas un beneficio social o de salud.

El beneficio social no es renunciar a tu vida social por una foto en una meta, privarte de ciertos caprichos o disfrutar de tu familia. Esto de correr lo elegiste porque te hace disfrutar, no para quitar de tu vida todo lo que te hacía disfrutar por esto. Debe ser un complemento para tu felicidad. Correr por placer, por superación personal pero no vivir obsesionados con un entreno o con la marca de la carrera. HAY QUE DISFRUTAR DE CADA ZANCADA SIN OBSESIONES.

Si no sale, ¿qué pasa? Pues que hay bastantes diferencias en función de cómo hayas recorrido el camino:

a) Puedes haberlo recorrido disfrutando (lo recomiendo), dando todo en tus entrenamientos, sí, pero sin renunciar a nada. Disfrutas de tus hijos y de tu pareja, de una cena, de una fiesta, de un fin de semana de relax, del cine, de acostarte tarde un sábado porque se tercia, de buscar un hueco antes o después para “salvar” ese día y no cumplir el entreno, sino simplemente salir a correr.

b) Puedes haberlo recorrido siendo más de lo que eres. Comportándote como un profesional. Esclavizado por los tiempos de las series o por haber perdido 1”/km en el rodaje (¡1»!), por no comer tal o cuál cosa, por dormir lo mejor y máximo posible, diciendo no a esa cena de amigos o a esa comida de amigas. Renunciando a un paseo tranquilo porque hoy toca fuerte. Cabread@ contig@ mism@ porque no te ha salido el entreno, etc.

Como ves, todo esto produce un desgaste emocional, un peaje que hay que pagar antes de ponerse en una línea de salida. Seguramente ambos perfiles de personas querrán hacerlo lo mejor posible en una prueba determinada pero las consecuencias ante un revés (y lo habrá siempre) son totalmente diferentes.

El exceso de presión, de ilusión, de expectativa ante un logro hace que estemos alejados de nuestro punto de inicio, de nuestro estado emocional normal y por ende, las consecuencias ante el error y ese alejamiento de la realidad hace que afrontemos una decepción desde la catástrofe más profunda.

¿Merece la pena sacrificarte como un profesional sin serlo?¿Merece la pena ese segundo de mejora teórica que a veces por la presión no termina de llegar? ¿Merece la pena renunciar a disfrutar de sólo correr cuando puedes disfrutar muchas cosas incluida correr?¿Merece la pena estar tan jodid@ por un simple resultado?¿por un objetivo que puede intentarse una y otra vez?¿Puede hundirte un mal entrenamiento y/o carrera?

Si haces esto para disfrutar te aseguro que vas a estar muchos años corriendo, vas a poder conocer gente maravillosa a la que dedicaras tiempo, verás lugares increíbles a los que querrás volver (y volverás), conocerás tu cuerpo como mucha gente no lo siente, sabrás interpretarlo, cuidarlo, mimarlo y entenderlo. Tendrás vitalidad, te notarás enérgic@. Vivirás ilusionad@ con las carreras, con tus marcas, tus entrenos y tus logros pero no esclavizados y presionados. Correr, es sólo correr.

entrenador-atletismo

Con estas líneas no digo que renuncies a tu mejora, a tu exigencia, a tus ganas de mejorar o a tus sueños deportivos. Simplemente, te aconsejo que mires desde otro prisma todo eso. Si tienen que llegar, llegarán y está claro que cuando nos marcamos un entreno no todo es de color de rosas y que sufrir, vamos a sufrir, pero no renuncies a aquello que te hace feliz y lo reemplaces. Intenta cohabitar con todo, será más reconfortante y placentero. Haz que ese sufrimiento te aporte placer, compártelo y ayuda a otr@s a mejorar, es espectacular compartirlo.

 “Una persona no vale más por su marca que por su persona”

cropped-blog.jpg

 

 

 

Juan Pablo Gómez Martín

Entrenador Nacional Atletismo

Alto Rendimiento

@juanpacoach

http://www.entrenadoratletismo.com

CORRER A BAJAS TEMPERATURAS

entrenadoratletismo

Debido al frío que nos acompaña en este periodo he considerado conveniente dar algunas nociones sobre la manera de afrontar los entrenamientos y las competiciones con bajas temperaturas como así hiciera ya respecto a los entrenamientos que se pueden hacer con calor o los inconvenientes de entrenar a altas temperaturas.

Tenemos que tener en cuenta como eje fundamental con frío que el cuerpo necesita una temperatura óptima de trabajo para desarrollar sus capacidades al 100% y que si no alcanzamos esa temperatura podemos tener inconvenientes/problemas que surgen en nuestros entrenamientos/competiciones.

Tú que sales de manera asidua a correr sabes que no alcanzamos la misma temperatura corporal el día que hacemos un rodaje suave que el día que nos exigimos en un entreno duro. Las exigencias a nivel respiratorio y cardiaco (sangre repartida por el cuerpo) no son iguales y esto hace que incluso la temperatura corporal a ritmos suaves descienda cuando realizamos entrenos de más de 1h. Este punto de partida nos ayudará a escoger el tipo o cantidad de ropa que utilizaremos para salir a entrenar (* a partir de ahora cuando me refiera a entrenamiento también lo puedes asemejar a competición) y tendremos que decidir si abrigarnos más o menos en función de ello.

Otro punto a considerar sería el calentamiento. Antes de salir al exterior debemos aprovechar para aumentar la temperatura de los músculos, bien con movilidad articular, técnica de carrera o el uso del Foam Roller (puedes darte cachetes en los músculos para solicitar riego sanguíneo en la zona o frotártelos con las manos). Será conveniente que tras esto salgas al exterior, al sitio dónde entrenes y comiences con tu sesión de manera progresiva (de menos a más). Es decir, tendremos que adecuar a nuestro organismo para que esté al 100% como dijimos al inicio. El cuerpo irá cogiendo temperatura con el paso de los km y podrás exigirle más en función a ello. Es una locura salir fuerte desde el inicio de la sesión ya que podemos tener serios percances (problemas musculares, lesiones…).

Si usas pulsómetro debes saber que a bajas temperaturas las pulsaciones son más bajas de lo habitual. Y que ese frío en las manos no sólo es por las temperaturas exteriores sino porque el organismo reduce el riego sanguíneo en las extremidades y por tanto no alcance el calor deseado.

Puedes proteger tu cabeza (gorro o braga del cuello) para que no se escape el calor corporal y así tener una temperatura corporal más alta. Ten en cuenta que de la energía que va a producir tu cuerpo, destinará aproximadamente el 75% a mantener la temperatura y manteniendo la temperatura corporal (tapando las vías de escape) ayudaremos a gastar menos energía y por tanto, reducir fatiga.

La hidratación sean cuáles sean las condiciones del entrenamiento es de suma importancia para el rendimiento. Independientemente de que no sientas que estás sudando se va perdiendo líquido conforme vas entrenando y es por ello que debes seguir siendo constante con la reposición.

Por último, tras finalizar la sesión, debes inmediatamente realizar un cambio de ropa y abrigarte. La diferencia térmica al acabar el ejercicio puede producir resfriados innecesarios que con un poco de cautela pueden prevenirse.

¿Qué entrenamientos podrías hacer si no te ves para entrenar con frío y no “perder” mucho al forma?

Siguiendo el ejemplo del post ¿Qué entrenamientos hacer con el calor? Podríamos realizar ENTRENAMIENTO CRUZADO (si la opción es bicicleta, puede ser en rodillo en casa o estática).

Suerte con tus entrenos y competiciones y ¡a seguir disfrutando de cada zancada!

blog

 

 

Juan Pablo Gómez Martín

Entrenador Nacional Atletismo

Alto Rendimiento

@juanpacoach

http://www.entrenadoratletismo.com

PÍLDORAS PARA ENTRENAR (MEJOR) Y MEJORAR (MÁS)

¿Cómo podemos acercarnos a nuestros objetivos? ¿Cómo podemos hacer el camino que no lleva al objetivo más corto, en tiempo, o más placentero? ¿Cómo podemos estar cada vez más cerca de nuestra meta? ¿Desistiendo? ¿Pensando en fracaso? ¿Tirando la toalla?….

¿Trabajando? ¿Siendo positiv@? ¿Levantándome e intentándolo de nuevo? ¿Resilencia? ¿Constancia? ¿Actitud positiva?…

La actitud marca el progreso, la manera que tenemos de presentarnos al objetivo, de mirarlo cara a cara y de ir a por él mirándolo de frente sin agachar la cabeza. No vamos a conseguir nada sentadas, dormidos o llorando.

En la vida, y en el atletismo, nada es casualidad y todo pasa por algo. Pero es necesario que esas cosas que pasan sean en gran medida por ser tu elección, porque tú hayas decidido que sean así, porque tú hayas actuado para que sean de la manera que tú quieres que sean.

Para entrenar y mejorar, hace falta una pastilla, una píldora que te ayude a coger las riendas de tu progreso, esa píldora se llama compromiso.

entrenadoratletismo1

Compromiso contigo mism@, con el precio necesario que vas a pagar para conseguir tu recompensa. Con lo que estás dispuest@ a sacrificar para luchar por tu meta, lo que estás dispuest@ a poner a disposición del esfuerzo para acercarte con garantías a tu objetivo. Con lo que te quieres, te demuestras y eres capaz. Con tu autoestima, con tus límites, con tu zona de confort.

Compromiso con el entreno, con los días que vas a salir a correr, con los km planificados, con el gimnasio y los complementos, con el ritmo, con los progresivos, con las series.

Compromiso con tu entrenador, con el tiempo que te dedica, con el plan personalizado a tus características, con su implicación, su ilusión, su apoyo y su comprensión.

Compromiso con tu objetivo, lo que te mueve, te apasiona, te emociona, te hace vibrar y te saca sonrisas de esperanza.

NO importa lo que sueñes, lo que importa es lo que hagas.

Compromiso en términos de responsabilidad, de acciones que yo elijo libremente hacerme con ellas porque me da la gana, porque estoy 100% convencid@ que me van a acercar a aquello que quiero. Y sí, tomo la píldora y me responsabilizo totalmente de mis actos, de mis entrenos y de mis circunstancias. No pongo excusas, ni culpas.

Tengo el poder en mis manos (piernas) y voy hacer todo lo posible por conseguir lo que me proponga pase lo que pase.

Sin duda, esta es la pastilla mágica: una persona comprometida y motivada va a mil por hora.

¿Prefieres ir en taca taca?

#Cogelasriendas #Actúa #Puedesmásdeloquecrees #Cruzatulímite

cropped-blog.jpg

 

 

Juan Pablo Gómez Martín

www.entrenadoratletismo.com

@juanpacoach

Entrenador Nacional Atletismo

Alto Rendimiento Deportivo

 

LA RECUPERACIÓN POST-COMPETICIÓN

Has terminado tu carrera y has alcanzado el objetivo. Saboreas el éxito al cruzar la meta y la satisfacción, en forma de sonrisa, se apodera de ti.

img_6142

Vuelves a mirar el crono y si, lo has conseguido. Ha salido todo el trabajo realizado.

Ahora, toca ser inteligente y recuperar lo antes posible del esfuerzo para que tu cuerpo pueda estar preparado lo antes posible y puedas disfrutar de volver a correr como tanto nos gusta, sin molestias y buenas sensaciones.

Tras el esfuerzo, tus músculos se han ido degradando y has ido perdiendo los depósitos de «energía» que tenías acumulados. Están vacíos y es un momento crítico.

¿Sabes que los 30′ posteriores a terminar de correr son los más importantes para recuperar?

Se produce una fase conocida como «ventana metabólica», el momento en el que el cuerpo absorve y asimila mejor y más eficiente los nutrientes. Por lo que en esos 30′ debes aprovechar para reponer en forma de líquido (agua, leche, sales, hidratos -geles-) y sólidos (plátanos, manzanas, pasas, orejones, fruta deshidratada, barritas). Muy importante los hidratos de carbono.

En esta fase, no recomiendo estirar en exceso (poco o nada) y si es posible, trotar 10′ suaves para eliminar las toxinas que pueda tener el músculo.

¿Llego tarde? ¿estás leyendo esto y hace más de 30′ que has terminado de correr/realizar esfuerzo?

No pasa nada. Sigue siendo importante la reposición, sólo que ahora el cuerpo es menos receptivo. Es cómo si ahora en vez de coger el 100% de lo que comes o bebes, el cuerpo coge el 60%. ¡no es poco!.

Comer hidratos (arroz, pasta, fruta, verdura) e introducir proteínas (pescados y carnes) y por supuesto, no dejar de beber bien y en abundancia las 8-10h posteriores. Aquí perseguimos entre otras cosas la reconstrucción muscular (proteína).

Dormir bien, es fundamental para terminar de recomponer el puzzle.

En cuanto a la vuelta a los entrenos, ¿qué podemos recomendar hacer? 

Yo suelo trabajarlo así:

DÍA POSTERIOR A LA CARRERA: Trote suave 8-10-12k suaves+ejercicios de fuerza no agresivos y sin peso (isométricos irá genial)

DÍA SIGUIENTE: Descanso

AL TERCER DÍA: Rodaje en progresión

AL CUARTO DÍA: Introduciríamos trabajo dónde prime la intensidad (entreno fuerte)

¡A por el siguiente reto!

cropped-blog.jpg

Juan Pablo Gómez Martín

www.entrenadoratletismo.com

@juanpacoach

Entrenador Nacional Atletismo

Alto Rendimiento Deportivo

 

¿A qué sabe el éxito?

Para entender esa sensación, tenemos que buscar dentro de nosotr@s mism@s, evadirnos de nuestro alrededor y pensar en lo que te hizo dar la primera zancada. Buscar el motivo que te empuja cada día a salir a entrenar, tener presente la meta que nos marcamos, los sinsabores de la hoja de ruta y el anhelo de esos días en que todo salía.

Tener presente el futuro que nos planteamos en el pasado. Lo soñamos, lo intentamos, lo trabajamos….

Tener delante la parte de atrás de nuestros sueños. Ese lado indomable que domina nuestra cabecita y que nos hace empujar y empujar hacia delante, seguir y seguir pese a todo, pese a todos.

Tener en la cabeza lo que hicieron nuestros pies. El trabajo que soportaron, los caminos que recorrieron, el tiempo que tardaron en hacerlo y cómo quedaron las zapatillas tras el esfuerzo.

Tener en mente lo que abarcaron tus manos. Agarraste con todas tus fuerzas las ilusiones y te lanzaste al abismo, persiguiendo aquello que decían que era imposible.

Tener en la conciencia la locura que te llevo a arrancar. ¿Por qué tú? ¿Por qué ese objetivo? ¿Por qué quieres hacerlo? ¿Qué quieres conseguir? ¿Para qué hacerlo? ¿Qué te aporta o qué te ha aportado? ¿Qué ha supuesto para ti lucharlo? ¿Qué has aprendido de todo esto? ¿En qué has cambiado? ¿Qué esfuerzos has hecho? ¿Qué día te costó más? ¿Cuánto llegaste a sufrir? ¿Merece la pena?

Tener el reflejo de la imagen real de tus seres queridos. Compartir con ellos, trasmitirles el sentimiento y la emoción.

img_6142

Tener el crono encendido. El de la vida, el de vivir. Ese que parece que juega en nuestra contra y consume tu tiempo cuándo al contrario es simplemente un amigo que te advierte que debes gastarlo en aquello que te hace feliz. Pica km, dale al start, al lap. Sonríele y que te vea envejecer feliz.

Tener la sensibilidad en alerta, para cruzar la meta y dedicarte ese instante. Para cuándo acabes aquello que empezaste, aquello que tanto costó, que tanto luchaste, que tanto sufriste y por lo que tanto sacrificaste, sepas pararte y disfrutar. GRITAR.

Ese instante, el que hace que se te escape la sonrisa enorme, el que hace que una emoción indescriptible recorra tu cuerpo y te invada, te bloquee, te colapse y te llene cómo jamás te había llenado algo antes. Ese momento, tuyo y sólo tuyo, es el éxito.

Tener el oído bien abierto y escuchar decir: “Ojalá esta sensación la pueda sentir todo el mundo al menos una vez en la vida”.

El éxito, está al alcance de tod@s nosotr@s. Y si quieres sentirlo, lucha. Trabaja duro. Cree en ti y sigue adelante cuándo los días malos llegen. Sólo están ahí para que cuándo alcancemos el momento que esperamos, nos invada esa sensación que “Ojalá la pueda sentir todo el mundo al menos una vez en la vida”.

cropped-blog.jpg

Juan Pablo Gómez Martín

www.entrenadoratletismo.com

@juanpacoach

Entrenador Nacional Atletismo

Alto Rendimiento Deportivo